domingo, 3 de agosto de 2014

QUE HAY DETRÁS DEL PADRE ANTONIO?


Los delitos con los cuales se captura al padre Antonio conocido como “el padre Toño”, son reales y eso no se puede discutir ni mucho menos cuestionar a la Fiscalía General de la Republica. No hemos decidido escribir para tratar de hundirlo, por el contrario nuestra cercanía con su trabajo nos ha permitido poner verdades sobre mentiras destiladas desde la PNC actual y como nació la persecución política, sobre un personaje que no siendo salvadoreño ha hecho mucho más por nuestra patria, que quienes han estado al frente de la seguridad nacional. Dejamos muy en claro que la introducción de objetos a los penales, fueron males necesarios a traves de canjes y en donde un simple chip pudo haber salvado una vida o el obtener conocimiento geográfico de cementerios clandestinos.

Nace “La Tregua” y la información comienza a circular con preocupación. Esta estrategia se crea en base a una nefasta idea de sus dos principales articuladores y cuyos nombres son David Victoriano Munguía Payes y Mario Mijango, conocido como Raúl Mijango, mediador y personaje oscuro.

El padre Antonio tenía conocimiento cuales eran los propósitos reales de un pacto entre CAPRES y las pandillas y que por ende tenía todo el aval del ex presidente Funes. Las tandonas de militares habían logrado despacharse a Manuel Melgar del Ministerio de Seguridad, a Carlos Ascencio como director de la PNC y a Eduardo Linares del organismo de inteligencia OIE. En este entonces el padre Toño llevaba doce años en su proyecto de reinserción y rehabilitación de las dos pandillas mayores en nuestro país y a través del movimiento Pasionista, ayuda internacional y ONG´s, en el municipio Mejicanos se abrieron espacios como escuela, clínica dental, kínder y guardería, talleres vocacionales, panadería, entre otros.

El padre Antonio hizo rápidamente un análisis de lo que realmente representaba la “Tregua” y por el continuo dialogo que ha mantenido con las pandillas, pudo darse cuenta que dicho proceso significaba un terrible peligro para la sociedad salvadoreña, más allá de lo que ya vivía la ciudadanía.  Porque?

Personajes inescrupulosos cercanos al crimen organizado y el narcotráfico, habían tentado a los líderes de las maras para que estos pudiesen tener mejor operatividad desde los penales comunes a cambio de una visible reducción de los homicidios. Si ellos bajaban los homicidios serían trasladados inmediatamente desde el penal de Zacatecoluca a penales de menor vigilancia y así poner en marcha unos de los peores flagelos contra la sociedad salvadoreña, las narco pandillas.

Desde el periodismo investigativo se había hecho público el libre paso de la droga desde países del Istmo centroamericano, vía terrestre y se mostraban pruebas que existía una descarada vinculación entre las diferentes direcciones de la PNC, cuyas jefaturas recaen en comisionados y otros mandos, que por cierto se encuentran vigentes y de lo cual el actual director y sub director Ramírez Landaverde y Howard Coto parece no preocuparles. Les recomendamos que lean el libro del periodista Héctor Silva “Los infiltrados” y el Blog de Héctor Silva.

Esas mismas investigaciones daban a luz otras pruebas en donde las pandillas mayores, también tenían nexos con los carteles de la droga y esto se sumaba por supuesto a la problemática de la “Tregua”. Esto fue evidenciado en los principales periódicos de mayor circulación en nuestro país.

En el proyecto pasionista del padre Antonio esto no era ajeno y advertía más dificultades por los objetivos trazados desde la iglesia e institución de Mejicanos, en su intento por ayudar a las pandillas a menguar su vida delictiva y por las dudas que representaba la negociación gobierno-pandillas.

Uno de los mediadores y quien sería el portavoz directo de los militares en el negocio de la Tregua, veía en el padre Antonio un obstáculo en la rentabilidad de la misma y por muchas invitaciones que se le hacían al párroco, este se resistía a ser parte de lo que el llamo la paz mafiosa. Vino la orden de presión y asesinaron al allegado directo del proyecto insignia de los pasionistas, un pandillero reinsertado de nombre Geovanni. Esto cambiaria moderadamente la posición del padre Antonio quien ese mismo día del asesinato y a medianoche, se reunía con Raúl Mijango para apoyar de alguna manera el dialogo entre pandillas. Desde ese entonces, el clérigo comienza a visitar municipios declarados libres de violencia y los diferentes penales, así como las reuniones con los líderes pandilleriles de los diferentes penales.

En CAPRES y en el entorno de los militares que dominaban todo el espectro de seguridad, existía un seguimiento y espionaje incesante sobre la figura del padre Antonio, porque la Tregua no solo representaba ayuda internacional de cientos de millones de dólares, sino también un proyecto político ambicioso.

Los privilegios y prebendas definidos dentro de los penales eran y lo son de introducir celulares, chips, dinero, drogas, mujeres y menores de edad para visitas íntimas, televisores, comida de restaurantes, computadoras, armas, etc. Cada mediador tenía la libertad de comunicarse a cualquier hora con los líderes pandilleriles porque el pacto de la Tregua incluía esa prestación. Custodios y directores de penales por igual y de manera discreta introducían todos estos ilícitos, porque el compromiso era menos asesinatos pero no extorsiones. A finales del 2013 varios directores de penales fueron despedidos por comprobárseles que recibían dinero de las pandillas. Ellos nunca fueron acusados, mucho menos llevados a los tribunales porque era parte de lo que el mismo ejecutivo había fomentado.

El padre Antonio convivió con todo eso y más, y lo prioritario era detener el ingreso de más pandillas al narcotráfico. Las estructuras de estos carteles penetrados dentro de las instituciones del estado, pujaban porque el padre Antonio fuere desplazado de ese proceso y los mismos pandilleros de los diferentes lugares, le brindaban la información del movimiento macabro de los otros mediadores y las autoridades que incluían la PNC, el ministerio de Seguridad y el organismo de inteligencia en manos de los militares fieles a Mauricio Funes.

El viejo Lin y una parte de la pandilla 18 llamados los “Sureños” se comprometieron a mantenerse alejados de los vínculos del narcotráfico que la Tregua ofrecía. Para ello el padre Antonio se comprometió a trabajar con ellos, brindándoles logística y apoyo para compenetrarlos más en un programa con soluciones estructurales que conjuntamente con el ex ministro Ricardo Perdomo, ejecutaron para el nuevo gobierno y el cual fue echado a la basura.

Cuando la Sala de lo Constitucional declara improcedente que los militares ocupasen cargos en seguridad pública, Mauricio Funes le encomienda al ministro Perdomo esa tarea. Perdomo venia de recopilar datos acerca del narcotráfico, los militares y las pandillas desde el OIE. Se había logrado recoger un cúmulo de información confidencial que evidenciaba que la Tregua no era otra cosa más que un ala del narcotráfico que había logrado penetrar a políticos, funcionarios y a la Fuerza Armada misma. Contradictoriamente dentro de los cargos de seguridad ciudadana había un choque de grandes ligas entre un ministro que trabajaba con el pacto criminal de gobierno-pandillas y otro que intentaría limpiarlo.

Ricardo Perdomo no confiaba en nadie dentro del ministerio que asumía, pero por principios e idoneidad logro encontrar en el padre Antonio un aliado para la lucha que se avecinaba. Dentro de CAPRES y los mediadores de la Tregua había reclamos por lo que Perdomo estaba haciendo y no se quedaron quietos, ubicándole al padre Antonio vigías que le llevaban toda la información al OIE y a Raúl Mijango.

Estas argollas ligadas al narcotráfico lograron penetrar en la misma intimidad del padre Antonio y ponían sobre la mesa de la oficina de Mauricio Funes toda la información pertinente. Estados Unidos no era ajeno a todo lo que derivaba en la Tregua mafiosa y mantenía cierto recelo contra Funes y los militares a tal grado que en el último año de gestión rompieron contacto con CAPRES. El FMLN tampoco era ajeno a toda esta debacle en seguridad pública, pero prevalecía  la prepotencia del ex presidente Mauricio, los militares y el dominio que estos habían logrado tener con las pandillas, decidiendo el nuevo gobierno hacerse del ojo pacho y hoy por conveniencia electoral, deciden también que el padre Antonio representa mucho peligro y desde el ministerio de Seguridad en manos de Benito Lara, conspiran contra el párroco.


Habrá que preguntarse porque el FMLN no ha logrado detener al mayor líder de los Perrones y primo del ex presidente Tony Saca de nombre Herbert Saca. Habrá que preguntarle a la nueva dirección de la PNC cuyos mandos Ramírez Landaverde y Howard Coto, porque no combaten en el interior de la institución a todos esos mandos ligados con el narcotráfico. Habrá que preguntarse como población porque los principales cabecillas de la Tregua y las mafias de la misma, quienes si han introducido múltiples ilicitos, gozan de total impunidad desde las actuales autoridades. Habrá que preguntarse del por qué el principal mediador Raúl Mijango disfruta del amparo y blindaje del actual gobierno.

Misteriosamente con los nuevos cambios de la PNC se intimida a uno de los periodistas del Faro, quienes pusieron la base investigativa para desarticular al Cartel de Texis y cuyos implicados hoy se sienten muy heridos porque se les ha cerrado un gran negocio. Habrá que preguntarse porque la nuevas autoridades no dicen nada ni actúan contra el líder del Cartel de Texis conocido como Adán Salazar alias Chepe Diablo y quien la misma Casa Blanca lo ubica como un capo de la región. Habrá que ver la protección sobre partidos políticos y algunos políticos y funcionarios que mediante investigaciones se les anexa a carteles de la droga.

A la ciudadanía salvadoreña le solicitamos a no dejarnos engañar por capturas de fachada que tratan de ponerle sabanas negras a los verdaderos narcotraficantes, que yacen en las instituciones del estado y que desde allí usando el poder institucional, buscan chivos expiatorios para hacernos creer que se combate efectivamente el genocidio de las narco pandillas y sus socios gubernamentales.

Aplaudimos el trabajo de la fiscalía, su gran esfuerzo, su depuración real, pero no a la actual PNC que mantiene las raíces de comisionados y otros jefes con nexos perversos.

Que no nos sorprenda el decomiso y la incautación de furgones de droga. En el pasado se ha hecho lo mismo para ponerle zancadilla a la competencia y así hacernos creer que se trabaja de manera eficaz. Sabemos que en estos momentos existe una pugna para sacar de los escenarios a todos aquellos ciudadanos comprometidos a luchar contra estas organizaciones delictivas y uno de ellos es el padre Antonio.

Si hay bitácoras, escuchas telefónicas contra el padre Antonio ahora son utilizadas para formar evidencias contra él, cuando el mismo gobierno avaló que todos los protagonistas de la Tregua lo hicieran. La comunicación, el contacto desde celulares, los chats, los ilícitos en los penales entre otras cosas, son las regalías que la Tregua ha dejado y como repetimos y lo que cada ciudadano deberá de preguntarse es por qué la dedicatoria solo contra el padre Antonio y los gestadores directos hoy se encuentran en el Parlacen, otro reenganchándose de ministro y los demás gozando del dinero que genero este gran negocio.

El padre Antonio es una de las amenazas más latentes contra las oscuras estructuras enquistadas en las diferentes instituciones del estado salvadoreño. Urgen bloquearlo, sacarlo del escenario de donde se busca unir a todas las pandillas con los narcos. Quien no sabe que los pandilleros poseen armas, celulares y privilegios en los diferentes penales. Quien no sabe que desde allí tienen libertad de extorsionar y enviar ordenes de asesinatos, secuestros entre otros y la gran pregunta que nos hacemos todos los salvadoreños y de simple lógica es porque no los regresan al penal de máxima seguridad en Zacatecoluca? Es aquí donde el estado se convierte abiertamente en aliado de ellos y esto es gravísimo; y lo peor es que vamos para tres años de seguirlo haciendo, “Porqué es la gran pregunta”?

Separamos el trabajo magistral de la Fiscalía y nuestro artículo va más encaminado a poner las cosas en orden y bajo la cruel realidad que es. Ricardo Perdomo dejo pliegos de información que dan testimonio de todo lo que aquí declaramos y esta información ya voló desde hace meses a países en donde si ponen atención y que están vigilantes. Por más que las autoridades traten de maquillar o falsear estas verdades, tarde o temprano esto se hará más público y evidente, porque como dice el fiscal general, “los malos jamás ganaran la batalla” y que no se mal entienda que estas líneas llevan dedicatoria contra Luis Martínez porque no es así. Logremos separar las cosas y apoyémonos todos los buenos en la lucha contra las instituciones  contaminadas, que albergan a criminales de primer orden.


Para finalizar dejamos en el pensamiento de nuestros conciudadanos las preguntas siguientes:

1.   Porque la impunidad fomentada desde el estado no permite abrir una investigación seria contra todos los articuladores de la Tregua, especialmente desde Mauricio Funes hacia abajo? Que lo impide? O mejor dicho quienes la detienen?

2.   Se ha comprobado mediante aseveraciones del Director de Medicina Legal que a cambio de la baja de homicidios, se elevaron los cementerios clandestinos, los desaparecidos y los secuestros. Cuál es la verdad ante la población?

3.   La Fiscalía tiene en sus manos informes e investigaciones en curso de nexos de venta de armas entre Fuerza Armada, narcotráfico y pandillas muy cercanos al pacto de la Tregua. Quien o quienes con su poder político están interviniendo?

4.   Ante la alarma que el gobierno de Estados Unidos envió acerca del capo de la droga Adán Salazar porque se han quedado de brazos cruzados? Quienes son sus amigos políticos que le están garantizando protección?

5.   Existe un fuerte rumor que Raúl Mijango y el mismo David Munguía Payes tienen chantajeado al actual gobierno, que de seguir las investigaciones contra ellos, se va a destapar un escándalo de grandes proporciones y costos políticos electorales.

6.   Se sabe que parte de los convenios entre mediadores y el mismo padre Antonio existió el canje de introducir objetos a los penales a cambio de información de lugares de cementerios clandestinos. No es esto hasta cierto punto un mal necesario?

7.   Porque militares y Herbert Saca continúan con protección institucional que perjudica gravemente a la sociedad salvadoreña?

8.   Se sabe que el crimen organizado y el narcotráfico penetró aún más las instituciones y funcionarios con la gestión anterior. Porque no se interviene a Mauricio Funes? Que partidos juntamente con el FMLN se oponen a ello?

9.   Si se tiene el conocimiento pleno que desde los penales comunes existe una mayor operatividad de ordenes de extorsiones y asesinatos entre otros, que es lo que le impide a las nuevas autoridades regresar a líderes al penal de Zacatecoluca? Cuál es el actual arreglo, convenio, pacto o negociación?

10.                 Porque Benito Lara actual ministro de seguridad y los nuevos directores de la PNC en lugar de brindarle la información a la fiscalía, no llamaron al padre Toño para interrogarlo y cuestionarlo por los cargos que hoy le imputan? Que hay detrás de todo esto? Porque era necesario el escándalo mediático?

11.                 Si por un lado ya tenemos una intimidación seria contra un periodista del periódico virtual El Faro por el caso del Cartel de Texis y por el otro se detiene al padre Antonio que comprobadamente lucha contra las narco pandillas, que mensaje nos están enviando las nuevas autoridades? De qué lado están trabajando?

12.                 Hasta donde llegan las negociaciones entre el FMLN, Mauricio Funes y Elías Antonio Saca en todo esto?

El llamado es a la población salvadoreña a estar atentos y utilizar las redes sociales y la protesta necesaria, porque se puede vislumbrar que todos nosotros incluyendo nuestras familias, nos encontramos enfrentados a poderes políticos y del estado, que podrían llevarnos a una escalada de violencia sin precedentes por los síntomas en nuestro entorno que nos llevan a esa realidad. El problema es gravísimo y no debemos de tomarlo a la ligera.