El
partido Arena ha vivido situaciones graves e incomodas dentro de sus liderazgos
y pensaríamos que tan sola una mala experiencia que ha entrado y ha producido
serias heridas, deberían de ser lo suficientemente dolorosas, como para
inmediatamente salirle al paso a todas aquellas figuras que inmoralmente le
dañan.
Aún
no ha terminado de asentarse la grave crisis desatada por el ex presidente
Elías Antonio Saca Gonzales, la compra-venta de diputados llamados tránsfugas y
los otros parlamentarios viajeros, cuando uno de sus otros iconos dentro del
partido y también ex presidente de la Republica Francisco Guillermo Flores
Pérez, sirvió de troyano electoral para lograr mediante chanchullos, cinco años
más de gobierno dizque izquierdista en el pasado marzo del presente año.
Cuando
ya sacaron la tarjeta roja es imposible mediar o tratar de revertir el daño que
como onda expansiva aun incomoda el sentimiento de los salvadoreños. Paco
Flores es el gusano que aun carcome el seno del COENA y de las bases
nacionalistas y pareciera que existe una resistencia a no querer dar el paso
final de expulsarlo.
Cuando
sucedió la deserción pagada de los ex diputados areneros que ahora engrosan
diferentes partidos, al unísono casi todos decían que esa depuración de malos
elementos había fortalecido la democracia interna del partido. Hoy parece ser
que Francisco Flores no es visto de la misma manera y se corre el grave peligro
ante la indignación y rechazo ciudadano por los fondos de Taiwan, que esto
pueda generarle otro costo sin precedente con grandes posibilidades de perder
curules legislativos a seis meses de encontrarnos en los comicios electorales.
Una
persona tildada y calificada como corrupta no debe dejarse incidir en la
democracia de un país entero, alterando la correlación de fuerzas tan urgente y
necesaria en un gobierno que ante muchos ya atenta con sus políticas
socialistas. Algunos dirán que Flores no ha sido vencido en juicio, pero
retomamos las palabras del abogado Nelson García, quien aseveró que mediante
los débiles argumentos ante la comisión legislativa, él (Flores) ya fue
condenado por la sociedad salvadoreña. Solo veamos las recientes reacciones
ante su arresto domiciliario.
Los
juicios de la población ya se encuentran circulando a nivel nacional e
internacional y puede observarse desde el sector judicial ya una indignante y
connotada benevolencia, que no pasara de una pena mínima en relación a lo que
Flores hizo. Esto por consiguiente al mantener a Flores dentro de Arena será un cráter de
burla para la decencia de la población y elevara costos muy negativos para las
próximas votaciones del 2015.
Hemos
contemplado diversas reacciones contra los diputados viajeros encabezados por
Sigfrido Reyes, pero esto se vuelve más indignante cuando dos diputados de
Arena contemplando la ola de protestas ciudadanas, de una forma torpe se unen a realizar
un viaje en medio de la tormenta de malestares. Algo parecido lo vivimos hoy con
Flores. La avalancha y revuelo político se acrecienta cuando Arena se auto
dificulta, para sacar a uno de sus máximos miembros honorarios.
Independiente del cómo se dirima este caso en los
tribunales, la percepción de los salvadoreños ya no logra un indulto o disculpa hacia la
figura del ex presidente, mucho menos clemencia por el descaro y cinismo con el
cual ha actuado Flores Pérez.
El
FMLN y sus aliados placenteramente está logrando en dos días revertir el buen
posicionamiento de la derecha, a tal grado que el creador de esta estrategia
Mauricio Funes volvió aparecer como un mal necesario en la presente contienda
electoral.
Los
partidos amíbicos como GANA, PCN y PDC cuya imagen se arrastra al igual que
Francisco Flores, están volviendo a la vida gracias a sus pronunciamientos de
falsa indignación, que como todos sabemos son productos de esa alianza pagada con
favores por el partido oficial.
Quiere
Arena acertar en el blanco, quiere fortalecer sus renuevos con ese ejemplo de
elecciones internas recién hechas; entonces que expulsen inmediatamente a
Francisco Flores Pérez y que continúen con la buena dinámica de trabajo territorial
que venían realizando, porque de lo contrario están a las puertas del JAQUE MATE
político.
Quienes
están detrás de beneficiar con el acompañamiento hacia Flores, deberían de
pensar que mantener esta clase de favores, va a generar un efecto parecido al
de la recién aprobada reforma fiscal, vendrá un mal sobre otro hasta
convertirse en una tómbola sin detenerse.
Muchas
personas dentro de las filas areneras, comparten que Francisco Flores desde
hace tiempo debería de estar afuera del partido, como otro mal recuerdo al
igual que Toño Saca. Tomar una decisión extrema pone de manifiesto que el COENA
sí escucha a su bases.
Finalizamos
recordando aquellas sabias palabras del gran maestro de Galilea. “El que tiene
oídos que oiga”
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