¿QUIEN LLEVA VENTAJA EN LA LUCHA ELECTORAL DEL 2015?

En cuestión de realidades y no de proyecciones, escribiendo verdades y no discursos de engaño, podemos contemplar un escenario electoral con ciertos posicionamientos tempraneros y en donde las dos principales fuerzas políticas, se ubican de dos formas muy diferentes. En el caso del oficialismo (FMLN) se observa un grave declive y por el otro lado la oposición (ARENA), mantiene una marcada preferencia.

El partido de izquierda además del desgaste por el gobierno anterior, sufre escepticismo, desconfianza, rechazo y dudas como un gobierno de segundo periodo, viéndose hoy por hoy incapaz de llevar al país por los senderos de la recuperación económica, detener el avance territorial de las pandillas, controlar las crisis de alto crecimiento como el dengue y el Chikungunya en el área de salud y ejercer una política de educación, en donde se conjugan la calidad e infraestructuras físicas. Existen otros temas de nación muy importantes pero partimos de lo macro, aquello que el ciudadano votante valora. Si tan solo fueran tres meses de su gestión como izquierda, estaríamos siendo injustos, pero todo estamos conscientes que ellos fueron co gobierno en los pasados cinco años.

A excepción de las bases efemelenistas, son pocas las personas que creen que el gobierno de Mauricio Funes administrativamente dejó grandes logros. Muchos por decir millones, se encuentran seguros que la nueva crisis económica de El Salvador es un legado del gobierno anterior, así como el poder de las pandillas, sus derivados las extorsiones y sus asesinatos institucionales. Aun el oficialismo desearía contradecir esta realidad, cuando grita que ganaron su segundo periodo gracias a la buena gestión del ex presidente.

Veamos qué tan cierto puede ser esa teoría. Por supuesto que Mauricio Funes determinó el gane del FMLN hoy en el 2014. Pero bajo 4 estrategias bien definidas:

·      Efecto Francisco Flores.

·      Dividir la derecha a través del pacto con Elías Antonio Saca y todas las fuerzas que le acompañan (GANA, PCN, PDC, etc).

·      La manipulación desde el TSE y

·      Los fondos millonarios desde ALBA

Con todo y eso, estuvieron muy cerca de perder las elecciones porque todos sabemos que esos escasos miles de votos de diferencia en marzo del presente año, no le cayeron en gracia al mismo FMLN. Esto parece que ya se les olvido.

Con esta verdad y con una falsa celebración por no mostrar lo chocante y deprimente que fue ese pírrico gane, el partido rojo se lanza en su desafío de gobernar cinco años más. Los temores fundados en estos tres primeros meses de gestión se concretan, cuando millones de salvadoreños hemos visto la continuidad de esas dizques alianzas estratégicas entre el FMLN, GANA, PCN, y PDC, sumado por supuesto a las figuras de los diputados tránsfugas.

La Asamblea Legislativa hoy más que nunca es un ojo de huracán para la sociedad y aparte del sin número de viajes abusivos de sus legisladores con escaso fruto y el constante despilfarro, el ejecutivo retoma de nuevo la ruta de la sobre deuda y las alianzas de partidos conocidos como “El Bloque”, atreviéndose a jugar a la ruleta rusa y poniéndose sobre la sien un arma con la recién aprobada REFORMA FISCAL. Esto en sus diferentes manifestaciones comienza a iniciar dentro del seno ciudadano, una preocupación por la indetenible alza traducida en más costos y menos poder adquisitivo, cuyos efectos se trasladaran a un sin número de rubros.

La carestía del frijol incontrolable para el nuevo gobierno, los frutos de la Tregua entre pandillas, el dolor de cabeza del SITTRAMS, montar deuda sobre deuda soberana, sumado a un consorcio de elites políticas que a través de chanchullos manejan los hilos de la política que en lugar de inyectar optimismo, deprime; ubican al FMLN en uno de sus peores momentos.

El trabajo de la Sala de lo Constitucional, más lo sorprendente de la Fiscalía General vienen a deteriorar aún más la imagen de la alianza entre los mismos, FMLN, GANA, PCN y PDC. De qué modo? Bueno, los diputados tránsfugas deber de correr ridículamente a buscar refugio a otros partidos pequeños y las recientes ordenes de desafuero y capturas de algunos diputados por parte de la Fiscalía General, evidencian el narcotráfico en los partidos del “Bloque”. Estas realidades pesan en el pensamiento y sentimiento de la población y por mucho que lancen efectos distractores, en nuestra población va apoderándose una consigna del “prohibido olvidar”.

Para las bases del FMLN hoy más que nunca está quedando más claro, que las mismas figuras que de por si controlan al partido, son las que se están rotando en programas, discursos, decisiones inconsultas y el manejo inescrutable de los fondos, tanto de Petrocaribe, como ALBA y los institucionales. Ejemplo, la venta de la planta de combustible por más de cien millones de dólares. 

El poder dentro del FMLN se encuentra centralizado y radicalizado y muchos ex comandantes afirman que esto es una bomba de tiempo interna, que más temprano que tarde, tendrá serias consecuencias. En este punto existen muchos elementos más que con el correr de los días se irán ampliando.

Dicho todo esto y con la reciente encuesta del periódico nacional La Prensa Gráfica, el panorama para el 2015 pone mucha ventaja sobre la oposición que se concentra en un solo partido, su nombre ARENA.

El FMLN no enamora, por el contrario desencanta y la grave crisis financiera del país no parece tener salida ni aun con la reforma fiscal aplicada a partir del mes de septiembre. Las deudas de los compromisos con proveedores no están siendo honradas y aquellas expectativas que en cierto momento pudo despertar la izquierda, poco a poco se han ido desvaneciendo por los desaciertos.

La ideología no es el salvavidas que El Salvador necesita y para el salvadoreño promedio eso ya no es relevante. De una forma simple lo que no se quiere continuar observando son personas de discurso, mentirosas, aprovechadas e inefectivas. La gente quiere ver políticas económicas, de seguridad, de salud y educación que generen resultados a corto plazo, que existan opciones de empleo, de inversión, de canalización de recursos que provienen de nuestros tributos en calidad de vida, reduciendo así la emigración forzada y su principal consecuencia la desintegración familiar, en donde las pandillas aprovechan bien para el reclutamiento de muchos jóvenes.

Nos guste o no, el FMLN no encuentra el camino y tiene en su mano todo el poder institucional para hacer algo diferente, pero muy pocos los están palpando. El reclamo y el malestar seguirán acrecentándose mientras no exista un giro inmediato de al menos 30 grados y a la puerta de una nueva correlación de fuerzas, puede vislumbrarse un posicionamiento en la Asamblea jamás nunca visto, que estaría garantizándole a la derecha una buena fuerza de diputados.

En nuestra segunda entrega hablaremos de lo que no deberían de hacer las diferentes fuerzas político partidarias, sus falencias, sus fortalezas y que de continuar por ese rumbo auto trazado, lo que podremos ver concretizado en las elecciones que se avecinan. Pendientes……